Yemen se está cobrando trágicamente una de las mayores crisis humanitarias y operaciones de ayuda del mundo. En 2023, 21,6 millones de personas necesitarán algún tipo de ayuda humanitaria. El país se ha visto afectado por múltiples emergencias: conflictos violentos, bloqueo económico, colapso de la moneda, catástrofes naturales y la pandemia de COVID-19.

Se calcula que tres cuartas partes de las 4.3 millones de personas desplazadas en el Yemen son mujeres y niños, en tanto que aproximadamente el 26 % de los hogares desplazados son ahora encabezados por mujeres.

La tasa de mortalidad materna de Yemen sigue siendo una de las más altas de la región de Oriente Medio y Norte de África. Cada dos horas muere una mujer durante el parto en Yemen, la mayoría por causas totalmente evitables. Se prevé que más de 1,5 millones de mujeres embarazadas y lactantes sufrirán desnutrición aguda en 2023. Corren el riesgo de dar a luz a recién nacidos con retraso grave del crecimiento y de amamantar a niños desnutridos debido a la creciente inseguridad alimentaria.

Las mujeres y las niñas también siguen sufriendo de forma desproporcionada la violencia de género, exacerbada por la crisis. Las niñas son cada vez más vulnerables al matrimonio infantil, la trata, la mendicidad y el trabajo infantil. Las mujeres y niñas con discapacidad están aún más expuestas. 

Como parte del plan de respuesta humanitaria en Yemen, el UNFPA solicita 70 millones de dólares en 2023 para llegar a 3,9 millones de personas a través de las siguientes prioridades estratégicas:

• Servicios vitales de salud reproductiva, con especial atención a la atención obstétrica y neonatal de emergencia para reducir la mortalidad y morbilidad maternas.
• Servicios críticos de protección para mujeres y niñas, centrados en la prevención y respuesta a diversas formas de violencia.
• Kits de supervivencia de emergencia para todos los nuevos desplazados a través del mecanismo de respuesta rápida.

Actualizado el 27 de febrero de 2023