Noticias

Tres cosas que debe saber sobre los anticonceptivos y la COVID-19

La planificación familiar voluntaria es un imperativo de salud pública y de derechos humanos. Imagen de Unsplash/RHSupplies
  • 25 de septiembre de 2020

NACIONES UNIDAS, Nueva York – Este año se cumplen seis décadas desde que se introdujo la primera píldora anticonceptiva oral. Desde entonces, los anticonceptivos orales (y otros suministros modernos y fiables de planificación familiar) han sido reconocidos mundialmente como medicamentos esenciales. Los suministros de planificación familiar no solo permiten a las mujeres y las niñas hacerse cargo de su salud y de su futuro, sino que también salvan vidas al reducir el riesgo de muerte materna.

Hoy en día existe un consenso entre los profesionales de la salud y los responsables de la formulación de políticas en el sentido de que el acceso a la planificación familiar voluntaria es un imperativo de salud pública y de derechos humanos.

Sin embargo, el acceso a los anticonceptivos se ve constantemente socavado por una variedad de factores, incluidos mitos y estigmas generalizados, así como por cuestiones estructurales como problemas de la cadena de suministro y sistemas de salud con recursos insuficientes.

Hoy en día estos factores incluyen la pandemia mundial de COVID-19.

A continuación se presentan tres cosas cruciales que todos debemos saber acerca de los anticonceptivos y la COVID-19.

A photo shows a close-up of a pack of oral contraceptive pills on a pink and blue background.
Este año se cumple el 60.º aniversario de la píldora anticonceptiva oral. Hoy en día, el acceso a los servicios de planificación familiar está en peligro. Imagen de Unsplash/RHSupplies

1. En medio de la pandemia, el acceso a anticonceptivos está disminuyendo.

La pandemia está agotando los sistemas de salud pública en todo el mundo, interrumpiendo y retrasando muchos tipos de atención médica crítica. Una encuesta reciente de la Organización Mundial de la Salud determinó que la planificación familiar y la anticoncepción se encuentran entre los  servicios de salud más interrumpidos, ya que 7 de cada 10 países sufren trastornos.

“La pandemia está agravando las desigualdades, y millones de mujeres y niñas corren el riesgo de perder la capacidad de planificar sus familias y proteger sus cuerpos y su salud”, reveló la Directora Ejecutiva del UNFPA, Dra. Natalia Kanem, al inicio de la pandemia.

El UNFPA, el mayor proveedor mundial de suministros anticonceptivos donados, está trabajando para asegurar el flujo de suministros de planificación familiar a los sistemas de salud y a las comunidades remotas y en riesgo.

En Nepal, por ejemplo, el UNFPA está apoyando el asesoramiento en materia de planificación familiar y suministros anticonceptivos a las personas que se encuentran en centros de cuarentena. "A las mujeres les preocupa quedar embarazadas", explicó Kabita Bhandari, consejera de planificación familiar.

En Eswatini, el UNFPA está apoyando un sistema de mensajería móvil que proporciona información sobre el acceso a anticonceptivos. Y en Uganda, el UNFPA está apoyando un programa que permite a los usuarios recibir suministros de planificación familiar en sus hogares. El UNFPA también está proporcionando equipo de protección personal a los proveedores de planificación familiar de todo el mundo.

Aun así, se debe hacer mucho más para garantizar que las mujeres puedan acceder a los suministros anticonceptivos de su elección.

A photo shows a close up of an intrauterine device.
Las interrupciones en la planificación familiar darán lugar a vidas perdidas, salud en peligro y sueños no realizados. Imagen de Unsplash/RHSupplies

2. Las interrupciones de la planificación familiar serán catastróficas para las mujeres.

Al inicio de la pandemia, el UNFPA, Avenir Health, la Universidad Johns Hopkins y la Universidad de Victoria modelaron el impacto potencial de la pandemia sobre los servicios de planificación familiar,

y determinaron que seis meses de graves trastornos del sistema de salud en 114 países de ingresos bajos y medianos podrían dejar a 47 millones de mujeres sin posibilidades de usar anticonceptivos, lo que conllevaría 7 millones de embarazos no planificados.

Los embarazos no planificados, por supuesto, tienen graves consecuencias para la educación y los medios de vida de las mujeres y las niñas, pero también traen el riesgo de complicaciones relacionadas con el embarazo, e incluso de mortalidad, en un momento en que los sistemas de salud de muchos países están sobrecargados. Las mujeres de países  de todo el mundo están denunciando obstáculos para recibir atención prenatal y servicios de parto seguro.

Lamentablemente, la violencia sexual y de género también va en aumento, lo que puede aumentar el riesgo de embarazos no deseados para las mujeres y las niñas. El número total de embarazos no planificados relacionados con la pandemia no se puede saber, pero incluirá pérdida de vidas y de salud, y sueños no realizados para el futuro.

A photo shows a close up of condoms against a blue and yellow background.
La pandemia no disminuye el derecho humano a planificar la propia familia. Imagen de Unsplash/RHSupplies

3. Usted tiene derecho a planificar su familia. La pandemia no cambia eso.

Las interrupciones en la planificación familiar no son simplemente un problema de salud pública. Son cuestión esencial de derechos humanos.

En 1968, en la Conferencia Internacional de Derechos Humanos, dirigentes de todo el mundo convinieron en que "los padres tienen el derecho humano básico de determinar libre y responsablemente el número y el espaciamiento de sus hijos".

Este acuerdo, conocido como la Proclamación de Teherán, fue innovador. Reconoció que las mujeres y las niñas tienen derecho a evitar el desgaste, el agotamiento y los peligros de demasiados embarazos demasiado cercanos entre sí. Reconoció que hombres y mujeres tienen el derecho de elegir si, cuándo y con qué frecuencia convertirse en padres.

Las emergencias no disminuyen el valor ni la necesidad de este derecho humano.

Los responsables de la formulación de políticas, los sistemas de salud, los Gobiernos y la humanidad tienen la obligación colectiva de defender este derecho para todas las personas, especialmente en medio de la pandemia de COVID-19, en que los obstáculos han aumentado enormemente.

"La salud reproductiva y los derechos de las mujeres deben protegerse a toda costa", reclamó la Dra. Kanem. "Los servicios deben continuar, deben entregarse los suministros, y se debe proteger y apoyar a los vulnerables".

Utilizamos cookies y otros identificadores para mejorar su experiencia en línea. Al utilizar nuestro sitio web usted acepta esta práctica, consulte nuestra política de cookies.

X