Noticias

“Una sociedad sin violencia”: capacitar a los proveedores sobre cómo atender a sobrevivientes de violencia sexual en Palestina

Folleto del UNFPA que exige el fin de la violencia contra las mujeres y las niñas. © UNFPA Palestina / Samar Hazboun
  • 27 de marzo de 2023

JERICÓ, Palestina – “Crecí en una sociedad patriarcal en la que las mujeres siempre se quedaban atrás, y estas normas conformaron mis valores y mi comportamiento” explica Ayman Lubbad, un experto en violencia de género en un hospital público de Jericó.

En todo el mundo, los sistemas de poder patriarcales perpetúan normas e ideas que impulsan la desigualdad de género y sus devastadoras consecuencias, como la violencia de género. Estos problemas afectan a millones de mujeres y niñas cada año. De hecho, a escala mundial, una tercera parte de las mujeres han sufrido violencia de pareja, violencia sexual fuera de la pareja o ambas.

En Palestina, los datos apuntan a que la combinación de las actitudes patriarcales tradicionales y los efectos de la ocupación israelí han creado un entorno propicio a la opresión de las mujeres y las niñas. En 2017, el 17% de los hombres en Palestina declararon haber infligido violencia física a sus parejas y, en 2022, el 9% de las mujeres casadas confesaron haber sufrido abusos sexuales. 

Las sobrevivientes de la violencia de género precisan de acceso a atención médica y apoyo psicológico de calidad en un entorno seguro. Sin embargo, el sistema sanitario de Palestina se ha debilitado gravemente bajo la ocupación israelí y las normas sociales imperantes en el país llevan a la mayoría de las mujeres a guardar silencio sobre la violencia de género a la que son sometidas. Recurrir a los servicios de salud mental también es motivo de estigmatización.

En respuesta a estos retos, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y el Ministerio de Sanidad palestino han puesto en marcha un nuevo programa para capacitar a profesionales de la partería, la obstetricia y la medicina, entre otros, en la atención de pacientes que han sufrido violencia sexual. 

En 2022, Ayman Lubbad participó en varias de estas sesiones de capacitación sobre la atención clínica de la violación y la violencia de pareja. 

“Adquirí muchas habilidades sobre cómo dirigirme a las personas sobrevivientes de violencia y cómo tratarlas” explica. “Los formadores acuñamos un lema: Protegemos los derechos humanos y promovemos la igualdad de género. Queremos vivir en una sociedad sin violencia”.

Un círculo virtuoso

El personal sanitario que participó en las sesiones de capacitación del UNFPA sobre la atención clínica de la violación y la violencia de pareja estudió los fundamentos de la atención de las personas sobrevivientes: apoyo de primera línea, consentimiento informado, exámenes físicos, tratamiento médico y seguimiento psicológico.

A woman receives an ultrasound.
Una mujer embarazada visita una instalación del UNFPA en Belén para su primera ecografía. Crédito: © UNFPA Palestina / Samar Hazboun 

Puede que los proveedores de asistencia sanitaria no conozcan todas estas prácticas. “Antes de esta capacitación, nunca había lidiado con la violación desde una perspectiva clínica”, cuenta Munira Al-Abed, médica del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente. 

“Lo primero que aprendí fue que, para tratar con este tipo de situaciones, antes hay que habilitar un entorno de trabajo propicio”. 

Tras haber completado una serie de talleres, los participantes pueden convertirse en formadores certificados. De esta manera, el programa de capacitación del UNFPA promueve un círculo virtuoso que permite difundir información sobre el tratamiento de la violencia de género entre cada vez más personas. 

Desde su creación en 2020, el programa se ha impartido en más de 30 establecimientos de salud y centros de rehabilitación de drogodependientes en Gaza y la Ribera Occidental, y ha contado con la participación de cerca de 150 proveedores de servicios de salud. 

“Ahora me siento mucho más segura en mi faceta de formadora”, afirma Al-Abed. “Espero poder inculcar las habilidades necesarias a otros profesionales para que desempeñen su trabajo de la mejor manera posible y luchen contra la violencia”. 

Promover el cambio 

Ofrecer tratamiento a las personas sobrevivientes de la violencia de género no es más que una de las muchas maneras de acabar con esta práctica nociva. A fin de erradicar por completo este problema, las sociedades de todo el mundo, incluida Palestina, deben abandonar aquellas normas que perpetúen la desigualdad de género. 

“Las mujeres y niñas de Palestina merecen una vida digna. Para conseguirlo, el UNFPA seguirá trabajando en la creación de capacidades y la remisión a servicios de calidad en los sistemas médico, jurídico y social”, declaró Dominic Allen, Representante del UNFPA en Palestina.

Este programa de capacitación forma parte de la labor del UNFPA para aumentar el número de personas que luchan contra la violencia de género en Palestina, en aras de una mayor transparencia respecto a estas violaciones de los derechos humanos. 

“Como profesional sanitario, nada me enorgullece más que transmitir mis conocimientos a otras personas y luchar contra las normas sociales perjudiciales”, afirma Lubbad.

Utilizamos cookies y otros identificadores para mejorar su experiencia en línea. Al utilizar nuestro sitio web usted acepta esta práctica, consulte nuestra política de cookies.

X