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En la medida en que sigue propagándose el COVID-19, se aconseja a las mujeres embarazadas y lactantes que tomen precauciones

En las zonas más afectadas de China se están distribuyen suministros sanitarios, equipos médicos y otros productos esenciales. © UNFPA China
  • 05 de marzo de 2020

NACIONES UNIDAS, Nueva York - Las mujeres embarazadas deben tomar acciones preventivas de rutina para evitar la infección con la enfermedad provocada por el nuevo coronavirus (COVID-19), anunció el UNFPA en un comunicado difundido hoy. Esas medidas preventivas, recomendadas en consonancia con la Organización Mundial de la Salud (OMS), incluyen el diligente lavado de manos, evitar el contacto cercano con personas que exhiban síntomas de infección, cubrirse la boca y la nariz al toser y estornudar, y cocer completamente la carne y los huevos.

Los funcionarios de salud pública se han apresurado a contener la rápida propagación del virus. Más de 95.000 casos han sido confirmados en 79 países, según la información más reciente de la OMS, que ha declarado el brote una emergencia de salud pública de importancia internacional.

La enfermedad, causada por un coronavirus recientemente descubierto, ha provocado el temor generalizado y, en algunos lugares, presiones sobre los sistemas de salud.


Las familias, incluidas las mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, están enfrentando temor e incertidumbre ante el brote. © Unsplash/Macau Photo Agency

Poco se sabe actualmente sobre la vulnerabilidad de las embarazadas al COVID-19, lo cual contribuye a crear un clima de ansiedad para las mujeres. En general, los cambios físicos relacionados con el embarazo pueden exacerbar en algunas embarazadas la susceptibilidad a infecciones respiratorias virales. El UNFPA insta a los funcionarios de salud a tratar a las embarazadas con enfermedades respiratorias como "máxima prioridad".

"Si bien el miedo y la incertidumbre son respuestas naturales a los coronavirus, debemos guiarnos por los hechos y la información sólida", aconsejó la Dra. Natalia Kanem, Directora Ejecutiva del UNFPA. "Debemos mantenernos unidos en la solidaridad, la lucha contra el estigma y la discriminación, y asegurar que las personas cuenten con la información y los servicios que necesiten, especialmente las embarazadas y las que se encuentren en periodo de lactancia".

Higiene y precauciones

"La salud sexual y reproductiva es un problema de salud pública importante durante las epidemias, y el embarazo y el parto seguros dependen de sistemas de salud en funcionamiento y de la adhesión estricta a las precauciones para enfrentar la infección", señala el comunicado.

En la actualidad no existe una vacuna para prevenir la propagación del COVID-19. Las embarazadas infectadas deben ser tratadas con terapias de apoyo recomendadas por la OMS, en consulta con su ginecólogo/obstetra, según recomienda el UNFPA.

Las mujeres que amamantan que se enfermen no deben ser separadas de sus hijos recién nacidos, agrega el comunicado. No hay pruebas de que la enfermedad pueda transmitirse a través de la leche materna. Sin embargo, las madres que lacten y estén infectadas deben usar una máscara cuando estén cerca de su bebé, deben lavarse las manos antes y después de amamantar, y deben desinfectar las superficies contaminadas. Si una madre está demasiado enferma para amamantar, deben ser estimuladas a extraer leche para la criatura, tomando siempre todas las precauciones necesarias.

El apoyo de salud mental y psicosocial debe ser puesto a disposición de las personas afectadas y sus familias.


La salud, el bienestar, la protección y la dignidad de las mujeres y las niñas es un aspecto central de la respuesta del UNFPA. © UNFPA China

El UNFPA apoya la respuesta

El UNFPA está colaborando con aliados, Gobiernos y organismos de las Naciones Unidas en todo el mundo para enfrentar el brote de COVID-19.

En China, el UNFPA está apoyando los esfuerzos de salud pública, incluida la entrega de suministros médicos esenciales a los trabajadores de salud de primera línea, así como de productos sanitarios a las mujeres, las niñas y las poblaciones vulnerables, como los pacientes de edad avanzada. Estos suministros se distribuyen en la provincia de Hubei, que es el epicentro del brote.

El 23 de febrero llegó un primer lote de 262.000 toallas sanitarias a Wuhan, Huanggang y Xiaogan, tres ciudades de Hubei que se cuentan entre las más afectadas. Más de 315.000 pañales para adultos y una gran variedad de suministros médicos también fueron entregados a los hospitales y centros de salud locales.

El UNFPA también está en proceso de adquirir equipos de protección personal para médicos y otros trabajadores de la salud.

"Las necesidades de protección de las mujeres y las niñas deben estar en el centro de los esfuerzos de respuesta. Parte de la razón por la que estamos haciendo esto es para asegurar que se mantenga el enfoque en mantener la accesibilidad de las mujeres y las niñas vulnerables a servicios de salud sexual y reproductiva de calidad como parte de la respuesta", explicó el Dr. Babatunde Ahonsi, representante del UNFPA en China.

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