Desde las temperaturas y patrones climáticos cambiantes hasta las más severas tormentas y el aumento del nivel del mar, los efectos del cambio climático nos están impactando a todos. Es una emergencia mundial y uno de los mayores desafíos que enfrenta la humanidad hoy en día. Se necesitan medidas urgentes, que requieren coordinación en todos los niveles y soluciones a partir de estos.

A la vanguardia están los pobres y los más vulnerables, que a menudo carecen de los recursos necesarios para adaptarse al cambio climático y garantizar la protección de sus medios de vida y su bienestar. Las comunidades necesitan soluciones disponibles en el ámbito local para fortalecer su capacidad de adaptación, y también necesitan medidas ampliadas y específicas. En particular, las mujeres y las niñas –que ya están desproporcionadamente afectadas– seguirán estando rezagadas si no se adopta ese tipo de medidas. 

El UNFPA está trabajando con los gobiernos y otros asociados para apoyar las respuestas de adaptación al cambio climático y para poner a las mujeres y las niñas en el centro de estos esfuerzos. A medida que el mundo responde y se adapta a la crisis en curso, estas acciones deben proteger los derechos humanos de todas y todos.

 

Topic summary

Población y cambio climático

Entender la relación entre la población y el cambio climático es crucial para diseñar políticas que protejan los derechos de las personas, en particular sus opciones reproductivas, preservando al mismo tiempo el planeta. 

El crecimiento de la población, especialmente en los países más pobres, donde las tasas de fecundidad son más altas, a menudo es enfrentado como motor principal del cambio climático. Estos supuestos deben ser tratados con gran escepticismo. De hecho, el principal impulsor del cambio climático es la emisión de gases de efecto invernadero, y los países más ricos con los niveles más bajos de fecundidad producen los niveles más altos de emisiones.

Los países con las tasas de fecundidad más altas tienden a ser las naciones más pobres con los más bajos niveles de emisiones. Sin embargo, a pesar de que las personas que viven en los países más pobres han contribuido menos a la actual crisis climática, sienten su impacto de manera más intensa, y cuentan con la menor cantidad de recursos para adaptarse.

El cambio climático socava la salud y los derechos sexuales y reproductivos

El cambio climático tendrá graves repercusiones sobre la salud y los derechos sexuales y reproductivos. El calor empeora los resultados de salud materna y neonatal, y las investigaciones sugieren que un aumento de un grado Celsius en la semana anterior al parto corresponde a una probabilidad de mortinatalidad un seis por ciento mayor.

Se espera que el impacto del cambio climático duplique las necesidades de respuesta humanitaria para 2030. Con desplazamientos más generalizados previstos, las demandas al sistema de respuesta humanitaria para atender las necesidades de los afectados, especialmente las relacionadas con su salud sexual y reproductiva y la violencia basada en el género, crecerán sustancialmente.

Con el aumento de la sequía se espera que las mujeres y las niñas viajen distancias más largas para recoger agua y leña, lo cual las expondrá a la violencia sexual y basada en el género. La destrucción de los hogares y los medios de subsistencia, así como la pérdida de ganado y cultivos debido a la grave sequía, se han convertido en una realidad para las comunidades muy afectadas por el cambio climático. En algunos casos, esta pérdida de medios de vida conduce a aumentos en las relaciones sexuales transaccionales y al riesgo de embarazos de adolescentes.

Durante los desastres, los servicios de salud –incluidos los servicios de salud sexual y reproductiva– suelen ser limitados, y a veces no están disponibles, lo que significa que más mujeres dan a luz sin el tan necesario apoyo médico. Además, la capacidad de las mujeres y las niñas para manejar su menstruación con dignidad se ve afectada cuando faltan agua limpia y productos menstruales.

Cuando se produce un desastre relacionado con el clima, las mujeres y las niñas corren mayor riesgo de sufrir violencia de género. Las niñas que no pueden asistir a la escuela si son desplazadas, por ejemplo, corren el riesgo de que,  padres que ya no pueden permitirse cuidar de ellas si han perdido sus medios de vida, las casen temprano. Una niña casada con un hombre mucho mayor corre un mayor riesgo de violencia en la pareja debido al desequilibrio de poder en la relación.

Para muchas mujeres y niñas y otros grupos de personas marginados y vulnerables, así como para las personas con discapacidad, el impacto del cambio climático empeora sus problemas y vulnerabilidades ya existentes. Los esfuerzos actuales de adaptación al cambio climático simplemente no son suficientes, ni están diseñados para evitar el impacto desproporcionado sobre estos grupos de personas.

 

El empoderamiento de las mujeres y las y los jóvenes en el centro del cambio climático

Las soluciones deberían tener en cuenta cómo el cambio climático afecta a todas las personas, y a las mujeres y las y los jóvenes en particular. 

Los planes de acción climática deben incluir inversiones en la salud, la educación y el empoderamiento de las mujeres y las niñas, ya que ello contribuirá en gran medida a fortalecer la capacidad de las personas y las comunidades para adaptarse al cambio climático. También es fundamental considerar las necesidades de los grupos vulnerables de personas, como los pueblos indígenas, las personas con discapacidad y otros grupos marginados, especialmente para asegurar sólidos sistemas de alerta temprana que eviten pérdidas, protección durante desastres y medidas de protección social que reduzcan el impacto de la pérdida de medios de vida.

Las y los jóvenes, como líderes en materia de cambio climático, necesitan apoyo para construir adaptaciones dirigidas por las y los jóvenes al cambio climático, como aplicaciones que faciliten sistemas de alerta temprana, programas para limpiar los sistemas de drenaje para reducir el impacto de las inundaciones, y prácticas agrícolas como la agricultura mixta, para que también apoyen a quienes les rodean.

Antes de que comenzara la pandemia de COVID-19, el sistema de ayuda humanitaria estaba sobrecargado por responder a las emergencias climáticas y de otro tipo, socavando de ese modo las medidas de preparación y respuesta. La pandemia afecta ahora directamente los servicios de salud vitales, incluida la salud sexual y reproductiva, lo que provoca desigualdades cada vez mayores para las mujeres, las y los jóvenes y las personas mayores dependientes, las minorías raciales y otros grupos marginados. Es necesario preparar los sistemas de salud para afrontar los nuevos y mayores desafíos que traerá consigo el cambio climático a fin de garantizar la continuidad de todos los servicios de salud, incluida la prestación de servicios de salud sexual y reproductiva, durante las emergencias climáticas. La realización de evaluaciones nacionales de la vulnerabilidad y el aumento de la formación de profesionales de la salud para estar preparados para este desafío son pasos importantes en la esfera de la preparación. 

También es vital que, en la respuesta a las emergencias relacionadas con el clima, se incluyan las respuestas y la prevención de la violencia basada en el género.

Avanzar para asegurar un planeta más resiliente

El UNFPA apoya a los gobiernos en el diseño de soluciones para el cambio climático que permitan la adaptación de las personas y las comunidades. Este trabajo ayuda a asegurar que las políticas climáticas nacionales incorporen cuestiones de salud y derechos sexuales y reproductivos cuando se desarrollen las políticas, incluida la identificación de áreas de acción clave y la asignación de presupuesto para alcanzar las metas establecidas

El UNFPA cree que las y los jóvenes deben ser empoderados y apoyados para desarrollar soluciones innovadoras que mejoren la capacidad de adaptación de sus comunidades. Para hacer realidad su potencial, deben tener acceso a información y servicios de salud sexual y reproductiva precisos y basados en los derechos humanos.

Los impactos del cambio climático nos afectan a todas y todos. Ha llegado el momento de actuar. Trabajemos juntos para encontrar soluciones duraderas que ayuden a las personas y comunidades a adaptarse al cambio climático y a garantizar la protección de los medios de subsistencia.

Actualizado 21 de julio 2021